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04 septiembre 2020

El Anticristo

Termino aquí, pero antes quiero expresar mi sentencia. Condeno al cristianismo, formulo contra la Iglesia la más terrible de las acusaciones que haya lanzado acusador alguno. Es la más grande de todas las corrupciones que se puede imaginar; en ella palpita la voluntad de la máxima corrupción imaginable. La Iglesia cristiana no dejó nada libre de corrupción; cada valor lo ha convertido en un sin valor; cada verdad, en una mentira; y cada integridad, en una vileza. ¡Y aún se atrevan a hablarme de sus beneficios para la humanidad! Suprimir una miseria era contrario a su interés; vive de miserias y ha creado miserias para eternizarse. El gusano del pecado, por ejemplo, es una miseria con que la Iglesia ha enriquecido a la humanidad. La igualdad de las almas ante Dios, esa falsedad, ese pretexto para los rencores más bajos, ese explosivo de la idea que terminó por convertirse en Revolución, idea moderna, principio de decadencia de todo el orden social: esa es la dinamita cristiana. ¡Beneficios humanitarios del cristianismo! ¡Hacer de la humanidad una contradicción consigo misma, una vergüenza, una ruina, un desprecio hacia todos los instintos buenos y honrados! Para mí, éstas son las bendiciones aportadas por el cristianismo. El parasitismo, única práctica de la Iglesia, bebiendo, con su ideal de anemia y de santidad, la sangre, el amor, la esperanza de la vida; el más allá, la negación de toda realidad; la cruz, como signo de reconocimiento para la más sombría conspiración que ha habido nunca contra la salud, la belleza, la bondad, la bravura, el ingenio, la belleza del alma, contra la vida misma…

¡Si pudiera escribir en todos los muros esta eterna acusación contra el cristianismo, pegarla en cualquier lugar donde haya una pared! Tengo letras que hacen ver incluso a los ciegos. Llamo al cristianismo la única gran maldición, la única gran corrupción interior, el único gran instinto de venganza para el cual no existen medios demasiado venenosos, demasiado subrepticios, demasiado ruines, yo lo llamo la única, la inmortal vergüenza de la humanidad.

¡Y pensar que medimos el tiempo partiendo desde el día nefasto en que se inicia este destino tan fatal: desde el primer día del cristianismo! ¿Por qué no ha de empezarse a contar mejor desde el último? Por ejemplo desde hoy… ¡Transmutación de todos los valores!

Friedrich Nietzsche


22 enero 2019

La Conexión Cósmica.

Un Animal de Transición.
Somos el producto de cinco mil millones de años de evolución biológica lenta, fortuita, y no hay razón alguna para pensar en que se haya detenido tal proceso evolutivo. El hombre es un animal en periodo de transición. No es el clímax de una creación.
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En la actualidad, ejemplo particular de los cinco mil millones de años de historia de la Humanidad, la mayoría de los seres humanos deben fidelidad y obediencia al estado-nación (aunque algunos de los problemas políticos más peligrosos surjan todavía a causa de conflictos tribales relacionados con unidades de población muy pequeñas).
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Creo que la dificultad que todos experimentamos de extender nuestros horizontes de identificación en tal sentido (a todos los organismos de la Tierra) es, en sí misma, genética. Las hormigas de una tribu lucharán a muerte ante la intrusión de otras hormigas pertenecientes a diferente tribu.
Un Mensaje a la Tierra.
El mensaje que lleva a bordo el Pioneer 10 [...] es una especie de prueba cósmica de Rorschach, en la cual muchas personas ven reflejadas sus esperanzas y temores, sus aspiraciones y derrotas, los más oscuros y los más luminosos aspectos del espíritu humano.
Experimentos en Utopías.
Nuestros instintos y emociones son los mismos de nuestros antepasados y primitivos cazadores de hace un millón de años. Pero nuestra sociedad es asombrosamente diferente a la de hace un millón de años. En épocas de cambios lentos, los conocimientos y habilidades aprendidas por una generación son útiles, probadas y adaptadas, y se reciben gustosamente cuando se pasan a la generación siguiente. Pero en épocas como la actual, cuando la sociedad cambia extraordinariamente sólo en el curso de una vida humana, los conocimientos paternales ya no tienen validez alguna para los jóvenes. El denominado abismo generacional no es más que una consecuencia del índice de cambio tecnológico y social.
 Incluso en el transcurso de una vida humana el cambio es tan grande que muchas personas quedan aisladas de su propia sociedad. Margaret Mead ha descrito a los ancianos de hoy como día como involuntarios inmigrantes del pasado al presente.
Chauvinismo.
Así como nosotros somos organismo que únicamente nos sentimos "en casa "cuando pisamos tierra, aunque hayamos evolucionado del mar, el Universo puede poblarse con sociedades que nazcan en planetas, pero que únicamente se sientan cómodos en las profundidades del espacio interestelar.


Carl Sagan, La Conexión Cósmica.

02 agosto 2017

Ingeniería en Computación: excogitaciones y desafíos.

   Este trabajo versa sobre algunos diagnósticos y planteamientos iniciales, así como de un análisis todavía superficial del perfil profesional de Ingeniería en Computación; por otro lado, también se presentan y proponen algunos desafíos de importancia considerable en este mismo sentido. Finalmente se plantea y discurre brevemente sobre la redefinición de dicho perfil profesional, su reducción en tiempo, y la definición de un perfil profesional alternativo relacionado con la computación.

  Debido a la extensión y a la estructura inherente al documento, en lugar de colocarlo como una entrada de blog, proporciono al lector un vínculo al documento Ingeniería en Computación: Excogitaciones y Desafíos en formato pdf.

31 marzo 2017

La vida en imágenes.

De la madurez...
De la equidad...
De las religiones y la moral...
De la política...
De la "meritocracia"...
De los hijos...
Del desarrollo de la ciencia y la tecnología...
De los opresores y los oprimidos...
De la expectativa y la realidad...

Del creacionismo...
Del consumismo...

De las estrategias de solución modernas...


09 noviembre 2016

La necesidad de una verdadera revolución.

   La supuesta revolución de la primera década del siglo pasado, no es otra cosa más que una entretenida y quizá hasta interesante anécdota que muchos conocimos inicialmente en los libros de texto gratuitos de formación básica. Recuerdo que, aunque la historia no era de mi completo agrado, había relatos que describían los acontecimientos de la revolución como verdaderas historias de héroes, las cuales gestaban, al menos en mi mente en formación, una atmósfera de ideales y logros por los cuales valía la pena luchar, entregarse, arriesgar la vida, venerar la patria y las instituciones, etc., en pro de una vida mejor sobre todo, según esto, para los menos favorecidos.

   Lamentablemente el panorama actual ahora que soy adulto, es con toda seguridad aún más indignante que el de aquella época ¿Por qué? Porque aunque se supone que el nivel de alfabetización es actualmente más alto según los indicadores oficiales (lo cual implica, al menos en principio, que el número de personas que sabe leer y escribir es mayor), se ha recibido una educación mediocre, comprobable en documentos (certificados, títulos, cédulas, números), pero carente de fondo y sustento, por lo que aunque los índices digan una cosa, la realidad y la calidad es otra.

   De no ser así, resultaría muy difícil de explicar de otra forma por qué las "clases medias y bajas" (suponiendo que aún existan dos), siguen a la espera de una especie de redentor político que solucione todos sus problemas y deficiencias; pero todavía más, ¿cómo es posible que ante una serie de injusticias maquillas con el mote de "reformas estructurales" ninguno de nosotros haga absolutamente nada de fondo?, y no se trata de salir a las calles y fastidiarnos más la vida al estilo de la sumamente devaluada Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la cual forma parte, en su mayoría, de la peste y podredumbre que tiene al país en condiciones paupérrimas respecto a la educación, sino a una acción real y verdaderamente revolucionaria, un cambio drástico y radical que deje claro que ya no se está dispuesto a que sólo seamos unos cuantos los que sigamos cargando al país, mientras que los ricos son cada vez más ricos, los pobres cada vez más pobres y los políticos cada vez más rateros y cínicos.

   Las "reformas hacendarias" benefician como siempre a los ricos ¿Qué pasa con la clase política, a la que de un tiempo para acá todo el mundo quiere acceder? ¿Se deberá ello a los ofensivamente ostentosos sueldos y prestaciones, sin mencionar los embustes y privilegios obscuros de los que se puede echar mano sin tener que dar cuentas y en consecuencia, sin que haya repercusiones, lo que atrae tanto, más que la vocación de servicio que le debería ser inherente al servicio público? ¿Por qué no se bajan ellos el sueldo al nivel de un burócrata promedio en función de sus capacidades y de nivel de estudios, que paguen impuestos como deberían y limitan sus prestaciones y bonos? ¿Por qué no son ellos usuarios de los servicios públicos como los del sector salud por ejemplo? ¿Qué sandez es esa de los diputados plurinominales que nadie elige, pero que devengan un sueldo exagerado y heredan curules? ¿No es ésto acaso una de las quejas que se tiene en contra de los “maestros” que heredan plazas y que se pretende ya no suceda más con la reforma educativa? Candil de la calle, obscuridad de tu casa reza un sabio refrán. Aquí podría extenderme por páginas pero lo considero innecesario, espero haber expuesto en lo general mi punto.

   Por otro lado, cada vez que hay desastres naturales en temporada de lluvias por ejemplo, se recorta el presupuesto en todos los rubros importantes como el de la educación, ciencia y tecnología, infraestructura, etc., pero nunca se toca la mórbida obesidad burocrática de las altas esferas. No se necesitan grandes conocimientos de economía para saber que la prevención es, en general, mejor que la corrección. Es lamentable que muchas familias sufran las secuelas de los embates de la naturaleza, la cual está descontrolándose debido, entre otras cosas, a que no hemos sabido integrarnos en una sana convivencia con ella y destruimos, consumimos y arrasamos todo a nuestro paso, y sólo nos acordamos de ello ante éste tipo de situaciones tan lamentables. Si las autoridades hicieran su trabajo como deberían y no se permitiera la edificación de viviendas en las cuencas y laderas de ríos y zonas de peligro por ejemplo, se disminuiría de manera considerable este tipo de situaciones, pero estamos en México y somos mexicanos, y nuestro país es el país de no pasa nada. En este mismo sentido cabe decir que la población también lleva su parte de culpa, ya que la labor es conjunta; no todo es responsabilidad del gobierno, ya que una cosa es que las autoridades permitan la construcción de viviendas y otra que haya gente que construya o compre sus casas en cuencas y laderas. El sentido común dicta que esto último es ilógico y riesgoso, pero tristemente también es cierto que el sentido común es el menos común de los sentidos.

   ¿Por qué el sistema hacendario permite a grandes empresas y consorcios que deduzcan cantidades ofensivamente millonarias de impuestos? Una posible acción en este sentido sería de dejar de consumir productos derivados de todas estas empresas, pero en muchos de los casos resultaría imposible y aunque fuese factible, también sería insuficiente. Quizá la única salida temporal sería formar parte de una lucha armada, una verdadera revolución que transforme de fondo y de una vez por todas (al menos por un tiempo, ya que la corrupción es una característica inmanente al hombre en cuanto a especie), la situación económica y política de nuestro país.

   No se trata de demagogia, no se trata de resolver el asunto manifestándose tibia y cobardemente en las redes sociales, tampoco se trata de que muchos se sumen de manera moral y doctrinal, sino más bien de una postura sumamente analítica, de fondo y, sobre todo, de compromiso, para que no vaya a ser que al primer balazo los ideales salgan corriendo a la velocidad que nos habiliten las piernas. Dejemos de pagar impuestos, ¿es posible que nos metan a todos a la cárcel por hacerlo?, sólo en el colectivo, en la unión, en la masa existe la fuerza, en la individualidad somos suma y ridículamente vulnerables. El Sistema nos tiene tan sometidos y oprimidos que ni siquiera reflexionamos en ello, lo sabe y lo capitaliza.

   Con todo y como mencioné con anterioridad, considero que no hay una solución definitiva y absoluta, ya que siempre existirá el riesgo latente de volver a caer dentro de lo mismo que se corrigió debido a la propia naturaleza humana, incurriendo así en un círculo vicioso de corrupción, ensimismamiento, megalomanía, delirio de grandeza y poder ineherentes a nuestra especie; repitiendo una y otra vez todo en una suerte de ciclo sin fin de nefastez, autocompasión y autodestrucción. Aún así, valdría la pena intentarlo por nosotros mismos y por nuestros hijos, para que al menos algunas generaciones estén mejor y, ¿por qué no?, apelar un poco a la esperanza farisea, a la utopía de que nuestra especie cambie algún día.

   ¿Estaremos dispuestos o sólo celebraremos una vez más, tal como la voluntad del Sistema quiere, instruye, demanda e impone otro aniversario de la "revolución"?


11 octubre 2016

An Eschatological Laundry List.

  1. This is it!
  2. There are no hidden meanings.
  3. You can't get there from here, and besides there's no place else to go.
  4. We are all already dying, and we will be dead for a long time.
  5. Nothing lasts!
  6. There is no way of getting all you want.
  7. You can't have anything unless you let go of it.
  8. You only get to keep what you give away.
  9. There is no particular reason why you lost out on some things.
  10. The world is not necessarily just. Being good often does not pay off and there is no compensation for misfortune.
  11. You have a responsibility to do your best nonetheless.
  12. It is a random universe to which we bring meaning.
  13. You don't really control anything.
  14. You can't make anyone love you.
  15. No one is any stronger or any weaker than anyone else.
  16. Everyone is, in his own way, vulnerable.
  17. There are no great men.
  18. If you have a hero, look again; you have diminished yourself in some way.
  19. Everyone lies, cheats, pretends (yes, you too, and most certainly I myself).
  20. All evil is potential vitality in need of transformation.
  21. All of you is worth something, if you will only own it.
  22. Progress is an illusion.
  23. Evil can be displaced, but never eradicated, as all solutions breed new problems.
  24. Yet it is necessary to keep on struggling toward solution.
  25. Childhood is a nightmare.
  26. But it is so very hard to be an on-your-own, take-care-of-yourself-cause- thereis-no-one-else-to-do-it- for-you grown-up.
  27. Each of us is ultimately alone.
  28. The most important things, each man must do for himself.
  29. Love is not enough, but it sure helps.
  30. We have only ourselves, and one another. That may not be much, but that's all there is.
  31. How strange, that so often, it all seems worth it.
  32. We must live within the ambiguity of partial freedom, partial power and partial knowledge.
  33. All important decisions must be made on the basis of insufficient data.
  34. Yet we are responsible for everything we do.
  35. No excuses will be accepted.
  36. You can run, but you can't hide.
  37. It is most important to run out of scapegoats.
  38. We must learn the power of living with our helplessness.
  39. The only victory lies in surrender to oneself.
  40. All of the significant battles are waged within the self.
  41. You are free to do whatever you like. You need only face the consequences.
  42. What do you know...for sure...anyway?
  43. Learn to forgive yourself, again and again and again and again...

If You Meet a Buddha on the Road, Kill Him!, Dr. Sheldon B. Kopp.

14 septiembre 2016

México y los Méxicos chiquitos.

Cuando reflexiono sobre el actuar y el comportamiento general de los gobernantes y políticos de nuestro país, en la obesidad mórbida del estado y lo raquítico del pueblo, en la corrupción exacerbada y enriquecimiento desmedido que periodo a periodo vemos por parte de los políticos independientemente del partido que emanen, en la enfermedad crónica de poder y en su búsqueda última por el simple hecho del poder y casi nunca por el afán de servicio al país por quien sea y sobre lo que sea, y en tantas y tantas cosas, me veo también obligado irremediablemente a reconocer que toda esta podredumbre sucede también a una escala menor, con la misma esencia: todo el conjunto y serie de ineficacias, ineficiencias, ineptitudes, corrupción y aspectos sin sentido con los que vivimos a diario en nuestros trabajos, entornos y círculos cercanos: nuestro México chiquito.

La ley de facto del esfuerzo mínimo se ha vuelto un común denominador entre muchas de las personas con las que convivimos. Seguro estoy que al leer esto, a la mente del lector vendrán nombres de personajes que, lejos de distinguirse por una conducta ética, respetable, y con responsabilidad profesional digna de ser reconocida y alabada, su actitud y comportamiento son precisamente todo lo contrario; son personas que se conforman con ser, en el mejor de los casos, “profesionistas”, personas que ya “agarraron hueso” de cualquier tipo, y que sienten una estabilidad laboral más o menos sólida, por lo que su rendimiento consiste simple y sencillamente en sobrevivir, en hacer lo mínimo indispensable que les permita no perder su empleo (ya que la palabra trabajo queda sobrada en este contexto).

Este tipo de personajes caricaturescos bien podrían representar a pequeña escala al México que algunos tanto despreciamos y criticamos, mismos que podemos encontrar en nuestro trabajo, con nuestros compañeros, con colegas y familiares, e incluso en nosotros mismos. Todos estos Méxicos chiquitos son los que, en su conjunto, constituyen células cancerígenas que afectan a la sociedad y que en su conjunto en escala de nivel macro, representan el por qué del estado actual de nuestro país.

Desde esta perspectiva, considero fundamental que cada individuo realice una labor de auto análisis, y que en la medida de lo posible se tratara de descartar como filosofía de vida la ley del esfuerzo mínimo y todas aquellas actitudes relacionadas con ella, ya que dicha perspectiva, lejos de ayudarnos, sólo hace que nuestro país siga retrasado y hundido, pisoteado por sus gobernantes, y flagelado con el látigo de la corrupción que todos, en mayor o menor medida, hemos adoptado con nuestra actitud.

Es de muchos conocida la frase que reza “Cada pueblo tiene el gobierno que merece”, y nada más acorde a nuestra realidad, ya que mientras sigamos siendo un país en el que los índices de analfabetismo permanezcan verdaderamente alarmantes aunque maquillados con "indicadores" matizados a conveniencia de una pseudo educación, un país en el que el nivel de deserción de los estudiantes en sus diferentes niveles es preocupantemente elevado, en el que el abaratamiento de la educación es cada vez más frecuente, difundido y avalado por las reformas, estrategias e instituciones patito, un país en el que los gobiernos invierten más en su auto mantenimiento ostentoso y oneroso de partidos políticos en lugar de favorecer y fomentar el fortalecimiento a la educación (la primera ley de la burocracia es garantizar su propia continuidad), un país en el que en cada oportunidad se realiza un ajuste o recorte a los presupuestos en educación e investigación, un país en el que las personas tienen hijos como mascotas sin inculcarles ni enseñarles valores y respeto sin preocuparse ellos mismos por su educación de la cual son también responsables; por lo anterior y más es que nunca saldremos del hoyo en el que nos encontramos. Se trata de un círculo vicioso que a la gente en el poder, al Sistema (gobernantes, empresarios y religiosos) le conviene mantener.

Un planteamiento general de solución debe iniciar por una verdadera educación, una educación integral, de calidad y convicción, de conciencia y además dinámica, ya que en otro caso, seguiremos inmersos infinitamente e irremediablemente en este círculo vicioso; me explico: ¿de qué sirve una educación sin una cultura y conciencia seria respecto al ahorro y mejor aprovechamiento del agua por ejemplo?, cuando veo el desperdicio del vital líquido en gente que carece de estudios me molesta pero lo comprendo, pero cuando observo esta misma actitud en gente que se supone “preparada” y con “educación” y “cultura”, lo cual es bastante frecuente, me resulta nauseabundo.

Paradójicamente al sentido de querer a México y hacer algo bueno por nuestro país está lo siguiente: el mes patrio, mes en el que se supone todos debemos sentirnos orgullosos de ser mexicanos, cuando en la realidad poco o nada sabemos de nuestras verdaderas raíces. Para muchos el ser mexicano en septiembre es gritar en cada oportunidad (particular y especialmente la noche del 15 de septiembre) ¡Viva México cabrones!, el comprarse sombreros gigantescos donde se puede o no leer dicha expresión, el adquirir banderas, el vestir trajes típicos y comer antojitos, pero todos los demás meses (y hasta los mismos días del 15 y 16), hay que ser diferente, hay que ser corrupto, hay que trabajar lo menos posible, no tiene caso esforzarse, hay que fastidiar al prójimo, hay que hacer “negocitos” que nos dejen para lo que necesitemos, hay que quedar bien con el jefe a costa de lo que sea, hay que aprobar alumnos para tener mejores números qué reportar, hay que denigrar a nuestra raza, a los indígenas, hay que capitalizar su ignorancia y sangrarlos, regatearles lo más que se pueda, después de esas fechas, hay que guardar la bandera nacional para el siguiente año, o para un partido de la selección: eso sí es ser mexicano y querer a México.

 Es cierto y consciente estoy de ello, que no sólo por señalar estos y otros aspectos funestos vaya a ocurrir algún cambio en las personas, nadie por sí solo puede cambiar al mundo, pero estoy convencido de que el único cambio posible que en conjunto puede hacer algo como reacción en cadena, es iniciar por nosotros mismos, haciendo y poniendo nuestro mejor esfuerzo en lo que hagamos (o al menos tratar), y esto a su vez diseminarlo hacia nuestros hijos, amigos, parientes, nuestros estudiantes, y a las personas con las que convivimos, para ir haciendo así un efecto dominó que eventualmente podría cambiar al mundo, pero para ello, habría que empezar por cambiarlo localmente, empezar por nosotros mismos.

Este 15 de septiembre no será la excepción, el zócalo capitalino y los zócalos locales de estados y municipios de distintas partes del país estarán abarrotados de personas, de esas personas que dicen detestar y rechazar al gobierno, que no comparten sus políticas ni sus reformas, que no comulgan con sus propuestas ni con sus leyes ni acciones, de personas que ilusamente piensan "cambiar" al país  vociferando en redes sociales, de amigos y familiares de los 43 o de los 132 y de otros tantos. Este 15 de septiembre, y muchos otros pasados y por venir en realidad no hay nada que celebrar y sí mucho que lamentar...

15 mayo 2016

El Sistema.

   ¿Ha escuchado alguna vez algo del "Sistema"? Casi con toda seguridad su respuesta es afirmativa pero, ¿qué es el Sistema o a qué se refiere? Desde mi perspectiva hay varios tipos de "Sistema", pero el núcleo de todos es el Sistema Político Económico Religioso (SPER), el cual es el encargado, sin que nadie se lo haya explícitamente solicitado, de mantener el "orden" y el cada más frágil equilibrio de la humanidad.

   Casi cualquier problema o situación que pensemos, incluso aquellas que no sólo no nos podrían parecer adversas sino favorables, han sido maquinadas desde tiempos inmemoriales por un grupo de personas, con verdadero poder, con el poder de manipular nuestras vidas en más de un sentido, con el poder de decidir nuestro futuro y nuestro presente, con el poder de cambiar la historia futura de la humanidad si es que habrá alguna.

   El meta-sistema del sistema SPER es, en mi opinión, el Sistema Económico cuyo fundamento, objetivo, finalidad, meta, esencia y razón de ser es el poder por el poder en sí mismo: la excelsa maquinaria de la voluntad de poder materializada en dinero. Pero ¿quienes concibieron, diseñaron y operan esta maquinaria? ¿Quienes son "los hombres detrás de la cortina"? ¿Quienes son los dueños (literal) del mundo?: los dueños del dinero (véase Zeitgeist).

   Así mismo, debería ser menester para el ser humano consciente el cuestionarse acerca del futuro de nuestra sociedad en lo que respecta al consumo e insumo de alimentos (por mencionar tan sólo uno de tantos temas): ¿qué repercusiones tendrá la proporcionalidad de los alimentos respecto al exponencial, desconsiderado, desordenado, inconsciente e imparable crecimiento de la población?, ¿de dónde provienen nuestros alimentos?, ¿cuál es su calidad?, ¿podrá la tierra seguirnos nutriendo a pesar del infame envenenamiento que le hemos infligido por décadas?, ¿no le parece irónico y absurdo que México, la cuna del maíz, tenga que importarlo de otros países y que se estén dejando morir familias y variantes de lo que otrora fuera nuestra principal fuente de alimentación?, ¿sabe usted que el uso indiscriminado de pesticidas, además de las afectaciones ambientales que le son concomitantes, podrían estar afectando severamente nuestra salud debido a que los datos del nivel de afectación son proporcionados y manipulados por las mismas empresas productoras de los mismos, sin que la Organización Mundial de la Salud ni nadie pueda o quiera hacer nada?

 ¿De dónde se derivan muchos de los problemas? Su origen es el dinero: el enriquecimiento a cualquier precio es un problema más grande y grave de lo que en realidad se cree. Considere por ejemplo lo siguiente respecto a su propio círculo de allegados, ¿cuantas personas conoce que se hayan hecho planteamientos o cuestiones similares?, ahora bien, suponiendo que conoce a algunas personas o que usted mismo lo ha hecho ¿qué hace(n) al respecto?, ¿considera que existe una verdadera solución (no demagogia)?, ¿es viable, posible?

   Espero que el lector no me mal entienda, no se trata de ser fatalista, pesimista o amargado como dirían los más vulgares. Consciente estoy de que todos, en mayor o menor medida, hemos estado a merced de los espejismos propios de la sociedad de consumo que nos determinan la forma en que debemos llenar nuestros vacíos existenciales y emocionales en los que la religión tiene también su cuota de culpabilidad. Se trata más bien de tomar consciencia y volverse consciente, de ser más analítico y racional, de tal forma que las decisiones que tomemos estén basadas en reflexiones y no en recovecos y opciones que al Sistema le convienen. La solución no está tampoco en ningún partido político, ya que ellos mismos son secuaces del meta-sistema, engranes, partes móviles. La solución, si es que existe, podría estar en una consciencia colectiva, en un efecto dominó racional que progresivamente penetre en la mente y en la conciencia de nuestros familiares y amigos cercanos, para que ellos a su vez puedan replicar este proceso con los suyos en un efecto de onda que nos lleve a una evolución intelectual.

   En algunos estados de la República Mexicana se realizarán elecciones para gobernador. He tenido oportunidad de ver la (deleznable) propaganda "política" de los innumerables partidos políticos (ya perdí la cuenta de cuántos son) para los estados de Puebla y Oaxaca. No puedo calificar más que de onerosas y ofensivas sus "propuestas", empezando porque no las hay de fondo, sino que se basan en descalificaciones vulgares, sin valor ni propuesta real, y sin el más simple sentido de causa social, esencia de la política. Si las campañas fueran solventadas con sus propios recursos, su basura carecería de la menor importancia excepto por la molestia de tener que soportarla, pero el saber que el dispendio de recursos corre a cargo del erario mientras que las calles están llenas de baches, las personas mueren o se deterioran por falta de atención médica, y que los servicios y tantas otras cosas que sabemos todos están cada vez peor, no puede menos que llenarnos de indignación, ¿y qué vamos a hacer?, ¿seguiremos siendo embutidos inmolados al Sistema?, ¿el embrutecimiento disfrazado de educación como causa y originado por el mismo Sistema como táctica desde hace muchos años, ha tenido un efecto tal que es ya irreversible? Lo invito a reflexionar.